jueves, 12 de febrero de 2009

LA PIRAMIDE INJUSTA DEL CAPITALISMO


crisis global

La "burbuja" de la crisis
Obama continúa y triplica el negocio con los "rescates" financieros dejado por Bush


(IAR Noticias) 11-Febrero-09
Obama y el secretario del Tesoro, Timothy Geithner (a la izquierda) en una conferencia, antes de la investidura del actual presidente de EEUU.
Tal como sucedió con el plan "anticrisis" de Bush, y ahora con el plan de "rescate financiero" lanzado el martes por la administración Obama, el Estado USA (por medio de la Reserva Federal y el Tesoro) garantiza y se hace cargo del "salvataje" de las entidades quebradas o en emergencia financiera y lo "deriva" a las red de bancos privados que hacen negocio con los intereses de los créditos y el proceso de compras y fusiones garantizados por el Estado. Se trata de un reciclamiento de la "burbuja financiera" (en medio de la crisis recesiva) con el Estado como herramienta de ejecución.
Por Manuel Freytas (*)manuelfreytas@iarnoticias.comInforme especial
La dinámica de la crisis y las decisiones tomadas por la nueva administración norteamericana ya se encargaron de demostrar lo que IAR Noticias viene afirmando desde la comprensión estratégica del proceso USA : Obama no es nada más que la continuación de Bush por otras vías.
La guerra electoral periódica de demócratas y republicanos por el control de la Casa Blanca esconde una feroz competencia interna de las dos caras del lobby judio ("liberal" con los demócratas, y "conservador" con los republicanos), por los negocios y el control del Estado norteamericano.
Quien controla la Casa Blanca cada cuatro años, controla a su vez las tres herramientas esenciales para hacer negocios con el Estado norteamericano: El Tesoro, la Reserva Federal y la Secretaría de Defensa (el Pentágono).
Desde el Tesoro y la Reserva Federal, se desprenden todas las líneas de decisión y ejecución del macro-negocio financiero de los bancos y entidades de Wall Street (sobre todos de los integrantes del sistema privado de la Fed) con deuda emitida por el Estado norteamericano. Un negocio que se incrementó en grados notables con los "rescates estatales" a bancos y empresas quebradas por la crisis financiera-recesiva. (Ver: Súper-rescate estatal: Un negocio "privado" de los bancos que controlan la Reserva Federal).
En esta línea de orientación, la administración de Barack Obama (controlada por el lobby sionista del Partido Demócrata, e integrada en todas sus líneas estratégicas por ex funcionarios de Bill Clinton) lanzó el martes una versión calcada y triplicada del plan "anticrisis" de Bush-Paulson para rescatar "activos tóxicos" de bancos y entidades quebradas por la crisis financiera-recesiva que estrangula a la primera potencia imperial del planeta.
El programa de "rescate financiero" presentado el martes por el actual secretario del Tesoro, Timothy Geithner (ex presidente de la Reserva Federal de Nueva York), prevé movilizar hasta US$ 2 billones (1,5 billones de euros), procedentes del Tesoro, de la Reserva Federal y de inversores privados, bajo el argumento de que servirá para evitar la catástrofe financiera.
La suma casi triplica el plan de "rescate financiero" lanzado por Henry Paulson (el último secretario del Tesoro con Bush) en octubre pasado, y que no sirvió para detener la profundización de la crisis financiera-recesiva que ya se extiende por todas las variables del proceso económico estadounidense.
El primer tramo del macro-negocio privado con la crisis financiera se inició en octubre pasado con la aprobación por parte de la Cámara de Representantes de EEUU del plan de crisis de Bush para salvar a las entidades quebradas con dinero público. Una operación inicial de US$ 700.000 millones que el Tesoro USA (por medio de emisiones de deuda pública) entregó a los bancos privados del Sistema de la Reserva Federal. (Ver: Quiénes controlan el negocio del plan de rescate financiero: El papel de Goldman Sach).
Tal como sucedió con el plan de Bush, en el plan de "rescate financiero" lanzado este martes por la administración Obama el Estado USA (por medio de la Reserva Federal y el Tesoro) garantiza y se hace cargo del "salvataje" de las entidades quebradas o en emergencia financiera y se lo "deriva" a las red de bancos privados que hacen negocio con los intereses de los créditos y el proceso de compras y fusiones garantizados por el Estado.
El Estado norteamericano, por medio de la Reserva Federal y el Tesoro, "garantiza" la operación , y los bancos privados del Sistema de la Reserva Federal hacen el negocio. Y se cumple el axioma central: El sistema capitalista hace negocios tanto con las "burbujas" como con las "crisis".
Mientras la economía norteamericana padece una feroz crisis recesiva con quiebra generalizada de empresas del sector industrial y comercial, con despidos laboraless masivos, los poderosos conglomerados bancarios que integran el sistema de la Reserva Federal reciclan una burbuja ganancial con el Estado USA como instrumento.
Este proceso (donde se aprovecha la crisis fina ciera para generar rentabilidad capitalista) permite la consolidación de un puñado de conglomerados financieros "ganadores" de la crisis que se degluten a las instituciones quebradas mediante compras o fusiones forzadas.
En términos simples y reales, a la sombra del Estado, el sistema bancario privado que controla la Reserva Federal de EEUU concreta un negocio billonario con los impuestos públicos (el dinero de los contribuyentes que abonará el "mega-rescate") lo que hace que el costo de la crisis financiera privada sea pagado por todo el pueblo norteamericano.
Según comenta este este miércoles The Wall Street Journal, la falta de "detalles" del plan de Obama (leáse negocio del lobby demócrata que controla la Casa Blanca) ), provocó una adversa reacción del mercado y el Promedio Industrial Dow Jones cerró con una caída de 4,6%.De acuerdo con el Journal, Geithner (ex presidente de la Reserva Federal de Nueva York, que concentra a la mayoría de los bancos que se benefician del negocio con el "rescate") anunció una serie de iniciativas, cuyos lineamientos ya se conocían y estaban en marcha desde la administración Bush.
Para The Wall Street Journal, un sector del poder financiero de Wall Street (alineado en el lobby sionista republicano que hizo negocios con Bush) no fue consultado por Geithner y su equipo, así como tampoco fue consultado el ex secretario del Tesoro, Henry Paulson, comandante de la operación de la anterior administración, en una clara muestra de competencia entre ambos lobbies.
Equipo en crisis: Bush y detrás, desde la derecha, el presidente de la Comisión de Valores Christopher Cox, el secretario del Tesoro, Henry Paulson y el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke.
Deslizando la guerra interna entre ambos lobbies (el republicano y el demócrata) por el control del negocio con los rescates, The Wall Street Journal señala que el equipo económico de Obama tampoco consultó a Wall Street sobre el plan de rescate, donde "altos ejecutivos bancarios" han estado quejándose de haber sido dejados de lado en el proceso por el cual el gobierno de Obama delineó su más reciente plan de rescate.
Sumando más información entrelineas (de como un sector del lobby sionista que hoy está con Obama dejó afuera del negocio a otro sector del lobby que hacia negocios con Bush) The Wall Street Journal informa que "En una conferencia del Foro Estadounidense de Titularización en Las Vegas, un grupo de aproximadamente 50 personas dejó su desayuno para mirar el discurso de Geithner en televisión, en medio de risas burlonas mientras el Dow Jones perdía 200 puntos. El indicador cerró con un descenso de casi 382 puntos, un 4,6%, en 7.888 unidades".
Pero más allá de la guerra interna del lobby judío gubernamental por el control del negocio, en la práctica, los grandes bancos privados que conforman la Reserva Federal actúan (dentro del esquema funcional del "súper-rescate" financiero) como una supra-entidad prestataria con garantía estatal que maneja un fondo billonario orientado a hacer negocios (también billonarios) con los cadáveres dejados por el colapso financiero-recesivo en EEUU.
El Tesoro, la Reserva Federal (Fed) que preside Ben Bernanke, la Corporación Federal de Seguro de Depósitos, (FDIC) y la nueva Agencia Federal de Financiación a la Vivienda (FHFA, por sus siglas en inglés) son las entidades encargadas de ejecutar un fabuloso negocio financiero avalado por el Estado USA que tiene como argumento el de rescatar y/o comprar (mediante créditos e inyecciones de dinero) los títulos "tóxicos" y las entidades quebradas de la "burbuja" especulativa para sanear el sistema financiero privado imperial.
Se trata de una virtual "nacionalización" de la deuda privada con dinero de los impuestos pagados por el conjunto de la sociedad norteamericana, cuyo sector afectado por las hipotecas "tóxicas" no mereció el mismo trato de "salvataje" por parte del gobierno federal.
Además, el costo de ese negocio financiero con la crisis (ésa es la trampa fraudulenta) será pagado con dinero de los impuestos públicos (el dinero de toda la ciudadanía) en una maniobra que transforma la deuda privada en deuda nacional. Lo que, de hecho, "estatiza la crisis privada" y convierte al Estado en una herramienta activa de la especulación financiera.
En general, la prensa norteamericana coincide en que el costo billonario del super-rescate (que pagará la población a través de los impuestos) potencia el proceso de crisis estructural con desocupación por el que atraviesa la economía estadounidense.
La mayoría de los analistas proyectan un agravamiento de la presión fiscal (suba de impuestos) y un recorte de planes y beneficios sociales como el emergente más inmediato del mega-salvataje estatal a la banca imperial iniciada por Bush y continuada por Obama.
Lo que incidirá en una mayor suba de precios y recorte del consumo (ya desatados), que se sumarán a los estragos de la crisis crediticia para potenciar el proceso inflacionario-recesivo en que se encuentra la economía de la primera potencia imperial del planeta.
En suma, y a la luz de los hechos concretos, la Casa Blanca con Obama es una continuidad de la Casa Blanca con Bush.
Solo cambia el sujeto de los negocios: El lobby judío de la era Bush fue sustituido por el lobby judío de la era Clinton
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(*) Manuel Freytas es periodista, investigador y analista, especialista en inteligencia y comunicación estratégica. Es uno de los autores más difundidos y referenciados en la Web.Ver sus trabajos en Google